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miércoles, 22 de abril de 2009

El "Cacique" cayó herido entre los incas


Gerardo Pelusso llegó a Perú con un plan que, ofensivamente, preveía la presencia de Alexander Medina y "otro". La duda pasaba por su acompañante. Que podía jugar Marcos Mondaini, por su velocidad. Que podía hacerlo Ángel Morales, por su capacidad para cuidar la pelota. Sin embargo, el que sorpresivamente pasó a estar en duda durante la jornada de ayer fue el propio "Cacique" Medina, por culpa de una distensión en el bíceps sufrida en el movimiento realizado al momento de reconocer la red lumínica y el piso del estadio.

Ayer, cuatro horas antes del partido, Pelusso bajó de su habitación y, por una cuestión de papeles, le explicó al gerente deportivo, Daniel Enríquez, "si `Ale` juega, es Mondaini y él, y Coates queda afuera del plantel; si `Ale` no juega, es Mondaini y el `Morro`. Pero mirá que lo vamos a resolver ahora, ya".

Lo resolvieron tras la merienda, a las cinco y media de la tarde, hora peruana, es decir, tres horas antes del partido. Fue en una reunión entre Pelusso, Medina y el doctor Leonardo Salvarrey.

SILENCIO

La historia de aquella duda -Medina sí, Medina no- comenzó después de los trabajos en el propio estadio de Alianza el lunes de noche. Pero empezó en silencio. Medina se retiró de la cancha en las mismas condiciones que sus compañeros y nada se mostraba como fuera de lo normal. Pero eso fue lo que pareció, porque lo cierto es que sintió una molestia durante el movimiento.

"No di ninguna pista después del movimiento porque siempre lo primero que hago cuando siento algún dolor es hablar con el cuerpo médico y el cuerpo técnico", contó Medina tras certificarse que no estaría ni en el banco de suplentes.

parche. Por aquella salida "normal" de la cancha que el propio "Cacique" reconoció, resultó llamativo verlo bajar al lobby del hotel, a la mañana de ayer, con un parche en la pierna. Pues bien, venía de mantener una charla con el técnico y con el médico Leonardo Salvarrey. Como siempre, Medina estaba dispuesto a jugar. Pero Pelusso le hizo ver que no era necesario arriesgar, la situación no lo ameritaba porque el de anoche era un partido importante sí, pero no definitivo para el futuro de Nacional en esta Copa.

Es más, el doctor Salvarrey reconoció que Medina mostró una evolución muy rápida y que de haber sido necesario, hasta podría haber tenido minutos de juego anoche. No lo hizo porque los cuerpos médico y técnico creyeron conveniente que lo mejor era tomar precauciones y dejarlo fuera del plantel por esta ocasión.

"Tengo una bronca tremenda, pero los años en el fútbol y la madurez que eso va dando me hace saber que hay muchos partidos más por adelante y arriesgar hoy (ayer) sería una locura", explicó el delantero, tomando mate mientras sus compañeros hacían los trabajos precompetitivos para enfrentar a San Martín.

Fuente:ovación

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