Puntaje ideal

Nacional festejó en la cancha lo que no tuvo tiempo de hacerlo afuera, tras la obtención del Apertura. Y de paso dio una zancada -aunque quede mucho camino por delante- hacia la tercera fase de la Copa Santander Libertadores, al golear 3 a 0 a su homónimo paraguayo en la Olla.

Si bien el primer remate al arco fue del local, Nacional fue el equipo que dominó las acciones desde las primeras de cambio, marcando presencia en la mitad de la cancha, con una defensa segura y que no tuvo reparos en alejar la pelota de primera y sin arriesgar y con los quirúrgicos pases nacidos de los pies de Nicolás Lodeiro y Federico Domínguez.

Así, Álvaro Fernández avisó a los cinco minutos y concretó a los 9` definiendo en el área ante la salida de Ignacio Don tras recibir una notable habilitación de Lodeiro. El "Bolso" se puso en ventaja y a esa altura era merecido.

Una de las interrogantes en la previa era cómo le iba a quedar a los paraguayos la chapa de local. Y, al menos ayer, le quedó pesada. Se nota que se siente mejor jugando de visitante que en rol que anoche debió jugar. En la primera parte, esa en la que se dice el local sale a avasallar a su rival en busca de la apertura del marcador y de la tranquilidad, la "Academia" sólo inquietó con remates desde afuera del área. Le costó hilvanar jugadas, abrir la defensa uruguaya y echó de menos al volante Jorge Núñez, goleador del equipo y suspendido para este partido.

La primera llegada local por los costados fue recién a los 31 minutos, tras una estocada a fondo de Marcos Melgarejo, precisamente el sustituto de Núñez.

En cambio, cada vez que la pelota estaba en posesión de los uruguayos, estaba latente la posibilidad de llegar al segundo gol y simplemente -o no tanto- faltaba acertar en el último pase. Hasta que a los 39 minutos llegó nomás el gol tricolor. Pase de Marcos Mondaini en profundidad y certera definición del "Nico" Lodeiro, que dejó por el camino a Don.

¿Era justa la diferencia? Sí, porque Nacional encontró lo que le estaba faltando: gran manejo de pelota, fluidez en el juego y algo más que el aspecto anímico, que vaya si había servido hasta ahora.

Tras el segundo gol, el técnico local, Daniel Raschle mandó a la cancha al delantero Julio Ortellado y sacó al volante Ramón Cáceres. Pero el panorama cambió poco, aunque el palo tuvo que jugar a favor del "bolso" en una oportunidad que, como no podía ser de otra manera, llegó con un remate desde afuera. Es que en esos primeros 45 minutos, la única falla defensiva visitante apareció a los 37, momento en el cual Raúl Piris llegó por el medio del área chica para rematar tras un tiro de esquina desde la izquierda.

Y el Nacional uruguayo no liquidó el partido en el comienzo mismo del segundo tiempo, fue porque Lodeiro no pudo definir bien un pase de Alexander Medina que cruzó toda el área.

Pero lo hizo a los 19 del complemento, cuando Mondaini -que mejoró notablemente la imagen- aprovechó un rebote surgido tras gran tiro libre de Domínguez.

El "bolso" tuvo menos la pelota, pero la manejó mejor. Controló el partido, administró las fuerzas, cuidó los físicos. Y le dio para todo eso porque el local no tuvo un conductor, una queja que en las filas tricolores uruguayas se escuchó bastante este último tiempo. Hasta que lo encontró. Se llama Nicolás Lodeiro. Sí, es el mismo Lodeiro del año pasado. Pero muy distinto.

El Nacional uruguayo fue mucho más que su "hermano" de Paraguay. Ya cumplió, como en las últimas 10 ediciones de la Copa, con cazar puntos en el exterior y ahora debe hacerlos valer en el Parque Central. Su tocayo, seguirá con las ganas de obtener su primer triunfo copero en casa. Ayer, estuvo lejos de conseguirlo a tal punto que los hinchas pidieron "que se vayan todos… que no quede ni uno solo" y terminaron aplaudiendo a los uruguayos.

Las cifras

6 Puntos es lo que separan a Nacional de Peñarol en la tabla histórica de la Libertadores.

2 Goles en dos partidos de la presente Copa ya suma el juvenil Nicolás Lodeiro.

Fuente:ovacion