Juguemos en el bosque mientras el Ogro no está.... ¿Ogro está? Naaa...

Juguemos en el bosque mientras el Ogro no está.... ¿Ogro está? En Nacional no lo vieron. Dicen que el "Hueso" Romero se lo manducó en dos panes de entrada y que eso fue lo único que se supo de él en el partido. Fabbiani aprendió la lección del tricolor. Hay que hablar cuando se piensa lo que se dice, no cuando la boca quiera hacerlo de manera independiente. "En el Monumental le vamos a hacer cinco y le vamos a pasar por arriba", dijo el "Ogro", pero la realidad de los hechos es incontrastable. River Plate no solamente que no le pudo hacer un solo gol a los tricolores sino que estuvo cerca, pero muy cerca de perder este partido. Lodeiro se puso el traje de "Supernico" y cerca anduvo de lograr los tres puntos en el Monumental. En la primera se la quiso picar por encima del golero Barbosa y su genialidad se fue demasiado arriba. En la segunda, muy pocos minutos después, discernió de la manera correcta y el palo derecho del meta local fue el único impedimento que tuvo para festejar en Buenos Aires.

Fue empate, no hubo goles y hasta pudo haber ganado Nacional. Eso es lo que dirá la historia. Tal vez pocos se acuerden de una jugada que pasó en el primer tiempo y que le puso los "quetejedi" a los charrúas en la garganta. Cuatro remates, uno atrás del otro, fueron salvados por la defensa tricolor. Dos con atajadas de Muñoz y el par restante gracias a la reacción en la línea misma que tuvieron Domínguez y Romero. Si no hizo un gol en esa incidencia, era imposible que después el local pudiera hacer otro en el resto del partido. Ley de Murphy que le dicen.

Con este resultado (más el que se registró en Asunción) los tricolores quedan absolutamente cómodos en la tabla de posiciones. Solamente una catástrofe lo dejaría fuera de los octavos de final y ahora la misión de los tricolores será plantearse como único objetivo mantenerse como primeros del grupo, sumar la mayor cantidad de puntos posibles en los dos partidos que le quedan y enfrentarse con alguno de los peores segundos de los otros grupos.

Pero esa misión, la de ponerse con la calculadora en la mano para elegir rival, es para el cuerpo técnico y los entendidos. Lo otro, es decir el goce, el disfrute, la sensación de haberle tapado la boca a Fabbiani, queda exclusivamente para los hinchas de Nacional, que en la noche de ayer coparon el coqueto barrio de Núñez al grito del "soy del bolso, del bolso soy yo".

“A River lo dejamos en blanco”

El entrenador de los tricolores, Gerardo Pelusso, comentó al final del encuentro que: "Es un empate que nos deja cerca de la clasificación. Sabíamos que en el segundo tiempo ellos iban a buscar el resultado y se notó que no tenían resto. Además, llegamos con muchas chances de convertir. Tuvimos tres o cuatro chances. El empate me parece doblemente valioso. Nos deja muy bien posicionados con un pie en la próxima fase y además de la forma de que se logró. Queríamos saber si este chico Mauricio Pereyra es tan bueno como dicen", se sonrió Pelusso. "Sabíamos que no le iba a pesar nada y ya de entrada hizo una jugada fantástica, tiene gran futuro. Fueron varias las oportunidades de gol que creamos, pero además fueron claras. El equipo me gustó porque terminó imponiendo su juego ante un rival como River, que tenía la urgencia de ganar y lo dejamos en blanco".

“Prácticamente clasificados”

"No vinimos a defendernos sino a tratar de hacer un buen partido jugando con el nerviosismo de River. Ellos en el primer tiempo tuvieron algunas chances, pero Nacional se mostró sólido y eso resultó fundamental. En el segundo tiempo creamos varias situaciones que no pudimos convertir", comentó Oscar Javier Morales. "Tenemos un rico plantel, con una base de jugadores jóvenes. La muestra está Een Mauricio Pereyra que lo hizo muy bien. Con el empate del otro partido y este resultado, prácticamente estamos en la segunda fase".

Foto:Nicolas Theoduloz
Fuente:ovación